Beneficios y propiedades del Flúor
El flúor es un elemento químico muy usado en productos de prevención de caries.
Su eficacia está claramente demostrada científicamente a lo largo de los años a través de múltiples estudios por su capacidad para proteger y remineralizar los tejidos del diente, éstos son esmalte y dentina.
El beneficio del flúor viene principalmente por el uso tópico del mismo, es decir, su uso en pastas de dientes, colutorios, alimentos y agua fluorada. Esto quiere decir que es la persistencia y el contacto del flúor con la superficie dental.
El hecho de que haya presencia de flúor en nuestra boca hace que nuestro esmalte sea más resistente al ataque de los ácidos de las bacterias generadoras de caries. Además en caso de caries iniciada puede tener un efecto paralizador de la misma.
Otro beneficio del flúor es que ocurre a ingerir agua fluorada o con alimentos, esto se denomina beneficio sistémico, porque llega al torrente sanguíneo. Éste no es tan importante como el tópico que sería el principal, y hay que ser cuidadoso la ingesta de flúor en edad de formación de los dientes, es decir en los primeros años de vida, pues pueden producir fluorosis.
La fluorosis está muy asociada a situaciones endémicas localizadas en zonas del mundo donde hay agua fluorada en alta concentración.
Algunas poblaciones en su suministro de agua corriente aplican flúor como medida de prevención de caires, demostrando una disminución de la incidencia de caries.
RECOMENDACIONES EN EL USO DEL FLÚOR
Niños hasta 3 años. Cepillado de dientes sin pasta para higienizar los dientes temporales y crear hábito.
Entre 3 y 6 años. Cepillado de dientes con un pequeña cantidad de pasta de dientes, tamaño de un guisante.
Adultos. Cepillado con pasta de dientes de diferentes concentraciones desde 1500ppm a 2500ppm.
El cepillado en todos los casos 3 minutos y cepillando en sentido de encía a diente. Se ha de insistir en las zonas de más retención de alimentos, es decir, entre los dientes, en las fisuras y fosas de los molares y premolares y el margen de la encía con el diente.
En los casos de alto riesgo de caries en niños cuando se van haciendo revisiones periódicas se suelen hacer fluorizaciones con flúor de alta concentración en la clínica dental.
El flúor lo podemos obtener a través de las pastas de dientes, enjuagues diarios o semanales y geles.
Conviene recordar que la caries ocurre cuando coinciden en el tiempo los dientes susceptibles de tener caries, el sustrato o alimento para las bacterias, como es el azúcar y las bacterias que generan un medio ácido que baja el pH de la boca y genera caries. La saliva también es determinante en la aparición o no de caries.
Por lo tanto el flúor es un gran aliado para prevenir caries pero hay que intentar reducir algunos de los elementos anteriormente descritos para ayudar a la prevención.